Carta 2
Comisión: 5
Profesor: Santiago
Castellano
Alumno: Ari
Capalbo
Modalidad: Individual
CARTA 2- RESPUESTA
NEGATIVA DE NIPPUR AL BURRO
Luego de abandonar mi Lagash natal siendo tan solo un niño
en busca de aventura, luego de cruzar incontables desiertos, valles, montañas y
pueblos, a veces sin comida ni agua, peleando en cada uno de esos campos de
batalla con incontables personajes malignos, opresores de los pobres, que
realmente querían destruir el mundo, teniendo que derramar sus sangres con la
espada que mi espalda carga cada día, incluso frente a mujeres y a niños, para
así restablecer la justicia en este mundo oscuro, recibo la carta de un
¡¡BURRO!! Que me pide que mate a un chat
no se cuanto para cumplir su fantasía maquiavélica y morbosa.
No se si todo esto es real, o mi edad avanzada, el cansancio
de los viajes, el hambre que tengo por no comer durante días o más probable
aún, la tortura que ronda a mi mente desde que me surgieron preguntas
imposibles de responder sobre el propósito de mi destino y mis hazañas, son el
causante de semejante delirio. De todos modos, sea una alucinación o no, hablar
con un burro que quiere matar a alguien por diversión no es algo reconfortante.
Quiero que sepas una cosa, burro que no tiene nombre. La
única voz que he de escuchar a la hora de guiar mis pasos hacia la próxima
batalla, quien decida que sangre debo derramar y por qué, es la de un hada
espiritual que me ha seguido desde antes de que nazcan tus progenitores y la
estoy buscando sin cesar. No la voz de un burro ignorante que no sabe lo que es
el dolor, la muerte, el hambre, la injusticia, y tiene un amigo que se llama
Shrek.
Y estoy muy frustrado porque esta hada es quien tiene la respuesta
a mis dudas, el tranquilizante para mi tortura, el bálsamo para mis heridas, y
no me contesta hace varios días. Solo quiero que ella devele mis secretos, que
me muestre que hay detrás de cada sensación que mi cuerpo ha experimentado en
cada viaje. Mis pensamientos están enfocados en eso, por lo que no necesito
ahora recibir órdenes de un burro.
Únicamente lucho por la rectitud, para ayudar a los
necesitados, para eliminar a todos los malignos de la tierra, para eliminar el
dolor de este mundo y para llevar felicidad a cada pueblo de la tierra. Cada
gota de sangre que derrama mi espada, es por un propósito muy sabio y elevado,
mucho más de lo que tu alma puede comprender. No vine a ser el payaso tuyo y de
ese tal Shrek.
Te recomiendo que busques una idea mejor para motivar a un
guerrero histórico de mi talla. La comida no es algo que me interese para matar
a alguien. He pasado meses sin probar nada sólido y eso no me preocupa.
Mientras mi mente este ocupada en lo que ha de restituir a los pueblos del
mundo, cualquier necesidad física está lejos de captar mi atención.
Es más, si quisiera comer, podría llamar a los mejores
cocineros y cocineras de cada pueblo que he salvado para que me preparen
interminables banquetes con las frutas más dulces y jugosas, con las bebidas
más deliciosas y reconfortantes para que me recompensen por lo que hice por
ellos. Si deseara comer en este momento, no recurriría a que un burro me cocine
solo los domingos.
Lo único que desea mi alma en este preciso instante, es ver
de una vez el semblante de aquella hada que no quiere presentarse y hablarme
por fin. La única razón que podría despertar mi interés para hacerte un favor a
vos, sería que encuentres a esa hada y me digas dónde está.
Pero entre que un burro con un amigo llamado Shrek,
encuentre a un hada oculta en los velos de la inmortalidad, sumergida en el
reino del misterio y de lo espiritual, y un gato que vive en América, encuentre
un pez rico y único para saborear que nada a setenta metros bajo el agua en el
golfo pérsico, existen las mismas probabilidades.
Con respecto a este señor del que hablas, te quiero aclarar
que a mí nada me puede parecer futurista e imponente, ya que he dado mil
vueltas al tiempo cíclico, y me he encontrado con personajes malvados
pertenecientes a civilizaciones que el polvo ha tapado una y otra vez, de los
que no quedan registro y la estructura de tu mente no está capacitada para
entender. Así que lo que vos y tu sociedad consideran futurista, al lado de
estos verdaderos imponentes son Matusalén.
Por último, déjame decirte que he perdido toda esperanza de
que mi añorada Lagash, la cual muchas veces me arrepiento de haber abandonado,
siga existiendo.
La fragilidad del tiempo, el tiempo estacional, trae consigo
la destrucción de todas las estructuras, culturas, civilizaciones,
pensamientos, átomos, soles, gotas, océanos, que aparentan existir a nuestro
alrededor en determinado período. Por lo que creo tristemente que mi amada
Lagash, junto a mi familia y mis amigos, se lo ha llevado la marea. Es solo un
recuerdo que habita en mi corazón.
Debo confesarte burro, que pese a tu caradurez te tengo
cierto aprecio, y me siento cómodo para decirte algo que la mayoría de las
veces reprimo.
Muchas noches no puedo dormir por la tortura que siente mi
alma, sabiendo que estoy atascado en lo atemporal, en una dimensión fría y
distante, lejos de la marea, todo se derrumba a mi alrededor y solo yo
permanezco. En este momento de mi vida, las caras de mis padres son manchas
confusas y mi Lagash no es más que una punzada de angustia en mi corazón. Ni una sola imagen. Cada vez estoy más lejos
de mi origen.
Quizás, el hada que me ha seguido durante siempre y ansío
que aparezca de una vez, es el espíritu colectivo de mi adorada Lagash. Y esto
es alentador por momentos, pero luego pienso que, de ser así, las
probabilidades de que esta Hada aparezca son aún menores.
Así que déjame decirte, Burro, que no existe manera de que
ese señor Chat no sé cuánto, con su IA, pueda destruir una ciudad que ya no
existe.
Tengo que confesarte que me enterneciste un poco, luego de
releer tu petición varias veces. Sin embargo, mi respuesta final es un rotundo
NO.
Adiós Burro, no sé si te volveré a ver. Tengo que irme.
Batallas serias me esperan.
Suerte con el “malvado” señor chat y cuidado con sus
poderosísimas armas IA.
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